EDITORIAL: BIENVENIDA UNA NEGOCIACIÓN CON LOS GAITANISTAS
El pasado lunes el Presidente Gustavo Petro lanzo desde Apartadó una propuesta de negociación jurídica a los Gaitanistas donde expresó enfáticamente que: «El que tiene el balón en la cancha es el Clan. ¿Se atreve o no se atreve? Si no se atreve ‘guerriamos’, porque la decisión es destruir el Clan. Si se atreven, abrimos las mesas de negociación».
Ese mismo día, en la tarde los Gaitanistas devolvieron el balón en un comunicado que expresaba: «Aceptamos la invitación hecha por el señor Presidente, en el sentido de sentarnos a negociar las condiciones políticas que permitan las transformaciones sociales que todos queremos para las regiones en donde hacemos presencia”.
En un documento realizado, esta misma semana, por International Crisis Group que examina el origen, evolución, poderío e intentos de diálogo con el grupo armado ilegal, advierte que: «Es crucial no dejar por fuera a este grupo armado en la política de paz del presidente Petro».
Así las cosas, lo que procede de manera urgente es iniciar una Fase de Exploración, que permita de manera inmediata establecer elementos básicos para una posible Mesa de Negociación con la participación directa de la Fiscalía General de la Nación.
Para regiones como el Oriente Antioqueño donde existe, muy a pesar del negacionismo de la institucionalidad, accionar de este grupo armado ilegal, fundamentalmente en los corredores estratégicos abandonados por las FARC y el ELN, es muy necesaria una negociación con los Gaitanistas que permita la certeza de que en el Territorio no se repetirá la historia de desinstitucionalidad, de dolor, de horror y de muerte que padeció hace algunas décadas.
Esos corredores estratégicos que hoy tienen presencia de los nuevos actores armados quedaron vacíos fruto de la negociación de paz de Santos con las FARC, unos, y los otros como consecuencia de la derrota militar a los Elenos que hizo desaparecer su Frente Carlos Alirio Buitrago. La incapacidad del Estado de copar esos corredores y proteger a la Sociedad Civil permitió la incursión y expansión de nuevos actores como los Gaitanistas, que los controlan hoy.
Las pintas aparecidas el pasado miércoles en El Peñol, la incautación de armas largas en Alejandría hace algunos días, la captura de varios narcos importantes del último mes en Rionegro, el asesinato de un Agente de la Sijín cuando realizaba un allanamiento en Argelia y los ataques sicariales en diversos municipios de la Región, en lo que va corrido del año, no son hechos aislados como nos lo han querido hacer creer las autoridades.
Por eso le damos la bienvenida la negociación con los Gaitanistas.
¡El Oriente Antioqueño y Colombia no quieren que se repita una historia en la que todavía, dos décadas después, se están identificando los cuerpos de los desaparecidos en cementerios como el de Rionegro!