La rienda de mis viejos

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Por:

Jorge Mejía


Recuerdo como muy sabiamente y de diferentes estilos mis dos abuelos trataban sobre mi formación en la vida uno de ellos le decía constantemente a mi padre que éste muchacho tan mal arrendado, si él no se ponía las pilas no se iba a criar, que todas las quería ganar, que en todo creía que la razón única era la mía, que en todo quería hacer quién fuera de primero sin importar a quién me llevara por los lados; el otro abuelo poco se acercaba mi padre pero a mí constantemente me hablaba de las herramientas para sobrevivir y de cómo la humildad no era un don sino que era una actividad estratégica que permitía que los demás contarán con uno en beneficio de ellos y también En beneficio de uno mismo.
Esta mirada tempranera de ambos viejos hicieron que mi padre se preocupara bastante pues no era coincidencia que los dos pensaran lo mismo y aunque actuando distinto quisieran intervenir. Esta situación llevó a unos choques constantes entre padre e hijo tratando él de mostrarme el camino a su manera y yo orgulloso y soberbio diciéndole que mi camino era el mío y como yo lo veía, de triunfos y superación constante, que creía demasiado en mí y que con eso era suficiente.
Ahora que no tengo Ninguno de los tres acompañándome, discutiendo y diciéndome cada paso que hay que Regular o darle rienda amis temperamentos, ahora que he pasado gran cantidad de luchas, superado algunas y perdido bastantes por creer que soy el mejor, por pensar que debemos prepararnos para ser los únicos los mejores y los primeros y no entender lo que ellos con amor me querían enseñar, que esto es un trabajo de equipo, que todos nos debemos preparar como el mejor pero contribuir el uno con el otro para ganar en esta carrera de relevo, es que he comprendido lo importante que en su corto lenguaje ellos me querían significar. Hoy miro alrededor y veo hombres supremamente inteligentes mujeres nobles y tiernas que al subirse a un vehículo al tocar el volante transforma en su mente y se vuelven los agresivos que quieren rebasar todo vehículo orillar a quién me estorba y se vuelven armas letales al volante hoy veo empresarios prósperos y trabajadores que al llenarse de poder personas a su alrededor que le dicen que siempre tiene la razón cometen equivocaciones garrafales y terminan humillando a sus empleados hoy veo políticos que después de haber tenido el reconocimiento de sus pueblos le dan la espalda porque sólo buscan el desarrollo para sí mismos cuánto cabe en esas palabras en este momento de la necesidad de nosotros mismos dar rienda de nosotros mismos ponerle freno a nuestro León rugiente interior y saber que esa fuerza La necesitamos para luchar cada día pero que esa humildad estratégica no nos tumba la dignidad No necesitamos que nadie nos pizote para mostrar ser Humildes pero sí necesitamos entender que este mundo es compartido para que la soberbia se diluya y podamos seguir ganando juntos esta dura carrera de la vida sobre todo ahora que la pandemia nos ha enseñado lo frágiles que somos por exitosos que vayamos en un tramo, pues no sabemos cómo viene el siguiente tramo ni en qué posición nos corresponda ir.
Alimentate bien, vive saludable, entrena duro, trabaja cada día, busca ser el mejor, revisate constantemente, reconoce tus errores, no lastimes a nadie, se bondadoso, disfruta tus éxitos y aprende de tus fracasos, disfruta el camino de la vida que el final es igual para todos, esto que hoy comparto, ha sido escrito con un recorrido de equivocaciones y aciertos que me confieren autoridad para escribirlo.

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