Reconocimiento a él presbítero Francisco Ocampo Aristizábal como CAPELLÁN DE SU SANTIDAD:
Si se desea hablar de la memoria histórica del Oriente Antioqueño, por obligación se debe mencionar a Francisco Ocampo, un hombre de familia campesina nacido en la vereda El Valle de María del municipio de El Santuario, quien dedicó su vida al sacerdocio y ha sido un actor de fondo en todos los procesos adelantados en la subregión durante las últimas décadas; entre ellos se encuentran, parte fundamental de la reubicación del nuevo casco urbano del municipio de El Peñol, uno de los impulsores de la creación de la CAR Ambiental CORNARE, gestor y promotor de Coredi desde sus inicios, una institución de los orientales en la que gracias a esta, muchas personas han logrado salir del analfabetismo, en especial en el sector rural.
El padre Pacho es un referente e institución en la región del Oriente Antioqueño.
El presbítero Francisco Ocampo Aristizábal ha liderado durante muchos años, una profunda transformación del Oriente Antioqueño con su acción pastoral; por la defensa de los intereses sociales de las comunidades.
Ha sido un hombre que ha luchado por las causas justas, es más reconocido por llamarle el Padre Pacho, que por su nombre, la muy meritoria labor pastoral y educativa del padre Francisco, le ha merecido los mejores reconocimientos por parte de la dirigencia regional y nacional, ya que su tenacidad y empeño en estos nobles objetivos de promocionar la dignidad humana, ha enriquecido la sociedad con nuevas generaciones juveniles hoy llenas de esperanza y comprometidas con su progreso comunitario.
Es por eso, que desde el Vaticano el día de mañana se le hará un reconocimiento, pues se le otorgará el título de CAPELLÁN DE SU SANTIDAD, a partir de ahí, se le llamará Monseñor Francisco Ocampo.
Carlos Ruiz Director Ejecutivo del movimiento cívico del Oriente Antioqueño, expresa que, “es una muestra que se ha venido dando por varias instituciones de la grandeza del padre Pacho, el padre Pacho ha tenido en su accionar la defensa del territorio, y la defensa de los derechos ciudadanos, eso se ha concretado en que un pueblo tiene donde vivir, tiene un territorio, se ha concretado en que las comunidades del Oriente Antioqueño han podido acceder a la educación, ha luchado por la defensa de la vida, tiene un acumulado histórico, que apenas está siendo reconocido”.
Asimismo, Carlos Ruiz menciona que, “las nuevas generaciones se van a encontrar un ejemplo moral y político de una vida digna de haber sido vivida, honró la vida y supera en mucho a toda una cantidad de nuevas generaciones mostrándoles ese camino de dignidad, de autonomía, de criterio, de disciplina, de humildad, todas esas categorías que son las que contribuyen a que los grandes hombres sean reconocidos por las sociedades”.