SAE ORDENA DESALOJO AL CARE EN SAN CARLOS:
El Care es una política pública que se ha venido implementando en una planta física de un antiguo hotel que fue comando paramilitar, este consta de 5 salas, en la primera se encuentra con el pasado reciente del conflicto, la segunda el pasado antiguo de los ancestros, la tercera el restablecimiento, la cuarta los recursos y conexión y la quinta es el recordar permanente de los derechos humanos.
Además, allí se encuentran las sedes administrativas de varias organizaciones en línea productiva que se fueron fomentando en el marco del retorno con el acompañamiento de los diferentes proyectos.
La notificación de desalojo que hace poco recibió, tomó por sorpresa a todos, dado que el Punchiná presenció la llegada del terror y dentro de sus espacios albergó los más grandes terrores, como si dentro sucedieran las más grandes pesadillas.
Cuando por fin ceso el conflicto, sus paredes firmes y silenciosas seguían observando un nuevo capítulo de la historia de San Carlos, uno donde la paz y la reconstrucción fueron protagonistas, donde la unión y la perseverancia le devolviera la esperanza a una madre de encontrar a su hija desaparecida, donde nuevamente las puertas y ventanas del edificio fueran protagonistas, pero esta vez para resistir y re significar las memorias de las víctimas y preservar la memoria histórica de toda una comunidad.
“Hoy nos toma por sorpresa la notificación de desalojo, porque no es una sola organización, somos muchas, no es un tema individual, es la memoria colectiva del territorio la que se está viendo afectada” asegura Pastora Mira, fundadora del Care.
La notificación la fijaron el 18 y tiene plazo para entrega voluntaria del inmueble el 26 de enero, sino lo hacen, el 31 los desalojarán.
“No tienen ninguna justificación, nosotros el año pasado hicimos un derecho de petición a la SAE y a la Unidad de víctimas a que como sujetos de reparación colectiva, hicieran entrega a través de comodato bajo alguna figura jurídica este bien para que siguiera cumpliendo el objeto para el cual se encontraba, obtuvimos una negación y hoy nos encontramos con esa situación adversa a los intereses del territorio, lo habíamos tomado como una medida de satisfacción y hoy nos quitaron las ilusiones” manifiesta Pastora Mira.
Pastora, hace un llamado a la institucionalidad en su conjunto y a la unión de los ciudadanos y organizaciones para que recuperen este espacio, “lo consideramos un patrimonio donde se tiene la oportunidad de conocer y reconocer lo que pasó en el territorio en aras de que la historia no se vuelva a repetir y sea un lugar emblemático por la transformación de imaginarios y la transformación real que ha tenido la sociedad en este territorio de San Carlos de cara a la reconciliación individual, comunitaria, pero también al restablecimiento de los derechos que ha tenido nuestra población”.
La violencia contra los espacios de memoria, constituyen una perdida no solo material, sino simbólica de la lucha por la paz y la reparación de todas las víctimas del conflicto armado, es un retroceso en los procesos de re significación, una violación al derecho a la reparación y a la no repetición, de una comunidad que durante décadas vivió sumida en la violencia extrema. La notificación de desalojo al museo comunitario casa de memoria CARE , un lugar donde se encuentra la memoria expuesta de territorio, ahora quieren que desaparezca.
La administración municipal también se manifestó al respecto, con el siguiente comunicado.