¿RAPIÑA EN LA CÁMARA DE COMERCIO DEL ORIENTE ANTIOQUEÑO?

En la Cámara de Comercio del Oriente Antioqueño (CCOA), se vive una compleja lucha por el poder que, en muchos casos, ha sido vista como una verdadera «rapiña». Este fenómeno refleja una constante pugna entre diversos actores económicos, políticos y sociales al interior de la Junta Directiva, quienes buscan aprovecharse de la posición privilegiada que ofrece esta entidad para sus propios beneficios.
La Cámara de Comercio del Oriente Antioqueño, como organismo que representa a empresarios, comerciantes y emprendedores de la región, tiene la responsabilidad de velar por los intereses de la comunidad empresarial. Sin embargo, lo que ha sucedido en los últimos años es que algunos grupos de poder han intentado utilizar la Cámara no solo como una plataforma para el desarrollo económico, sino como una herramienta para sus intereses políticos y económicos.
Es tan grave la situación que un Senador de la República y precandidato presidencial, muy ajeno al Oriente Antioqueño, ya anunció el nombre del nuevo Presidente Ejecutivo. Esto sin que la Junta Directiva haya votado un cambio de su Presidenta Ejecutiva, Camila Escobar.
En ocasiones, el manejo de la Cámara de Comercio, en lo que respecta a su Junta Directiva, se ha visto empañado por prácticas desleales y falta de transparencia en los procesos electorales internos. Esta situación ha generado desconfianza entre los miembros de la comunidad de comerciantes y empresarios, quienes han denunciado la falta de democracia y la exclusión de voces críticas en los procesos de toma de decisiones.
La «rapiña» del poder, entendida como una lucha insostenible por el control de la Cámara, afecta directamente el desarrollo de la Región y, por supuesto, un muy mal ambiente al más alto nivel que ya empieza a hacer ruido en la Región. En lugar de promover un ambiente de cooperación y crecimiento, se alimenta un clima de competencia desleal y concentración de poder que perjudica tanto a los empresarios pequeños como a los nuevos emprendedores.
Es urgente que la Cámara de Comercio del Oriente Antioqueño mantenga su papel como una institución al servicio de la comunidad empresarial y como protagonista del Territorio, en la que prevalezcan principios de transparencia, equidad y pluralidad. Solo de esta manera podrá contribuir verdaderamente al desarrollo económico de la región, dejando atrás las luchas internas por el poder, sobre todo cuando se esa rapiña se da por intereses meramente personales y no de Región.